Si usted nunca ha tenido la oportunidad de disfrutar un Crème Brulée, un exquisito flan reconocido como uno de los clásicos postres franceses, por favor pruébelo en un buen restaurante. La corteza fina y caramelizada se obtiene gracias a un soplete que utilizan los cocineros. La crema horneada que lo recubre no debe ser fría, sino servida a temperatura ambiente. Estoy encantada de compartirles una versión casera, incluso saludable y maravillosamente coloreada con zapallo/calabaza/ahuyama.
Mucho antes de la llegada de la gente de Europa a América, los indígenas plantaron y comieron las "Tres Hermanas "- maíz, fréjol, zapallo. Las plantaciones de maíz y fréjol se complementan una a la otra en su crecimiento, siendo el fréjol un excelente fijador de nitrógeno que proporciona los nutrientes esenciales para el maíz, y a su vez, el maíz provee de su tallo al fréjol para guiarlo en dirección ascendente en su crecimiento. De igual manera en su producción, la ingesta de las tres plantas juntas proporciona una dieta balanceada y completa, con proteínas (fréjoles), carbohidratos (maíz) y vitaminas (zapallo). Desafortunadamente, debido a la práctica moderna de la monocultura, las tres hermanas son separadas y plantadas individualmente, destruyendo el valor nutricional para el suelo, que las poblaciones nativas en su sabiduría conocían como un principio de vida.
En mi reciente trabajo/diversión en el estado tropical de Meta, Colombia, estaba sorprendida por la dependencia de los zapallos conocidos como " ahuyama " en Colombia o " zapallo " o " calabaza " en otras áreas de América del Sur. Aunque otras verduras apenas se consumen en Colombia,,, (de hecho son meras guarniciones que acompañan platos de carne y carbohidratos), el zapallo forma parte del diario vivir durante todo el año. Hay muchas variedades que pueden cultivarse debido a las diferentes condiciones climáticas, altitudes, precipitación, etc. En Colombia descubrí que, sin necesidad de pelarlos, podían ser sumergidos a cocción por un tiempo lo suficientemente largo, como para que la cáscara se desintegrará parcialmente, produciendo una textura casi carnosa.
Me gusta ahorrar tiempo haciendo el puré de zapallo en grandes cantidades y congelarlo en porciones más pequeñas para luego utilizarlo fácilmente en cremas (sopas), pan de calabaza o en el budín.
Considerando que para mí el zapallo/calabaza/ahuyama es una verdura dulce, decidí probarlo en postres y creo que usted se llevará una grata sorpresa por el resultado en esta versión simple y saludable de Crème Brulée. Por supuesto, si está interesada en hacerla de una manera más sofisticada, se puede añadir crema de leche en lugar de la leche y una vaina verdadera de vainilla, pero por favor, inténtelo con el vegetal precioso de color naranja.
Budín de zapallo/calabaza/ahuyama
2 tazas de puré. de zapallo maduro
1 taza de leche
4 huevos de campo
1/3 taza de panela molida
1 cucharadita de esencia de vainilla
1/2 cucharadita de canela molida
Sal
Puré de zapallo maduro:
Para asegurar que el zapallo esté maduro (y dulce) la uña no puede entrar en la corteza de la hortaliza.
Corte el zapallo con la corteza en trozos y cocínelos al vapor hasta que estén suaves.
Con una cuchara, saque la carne de la corteza y aplástela con tenedor.
Budín:
Licue el zapallo y la panela a velocidad alta hasta tener una crema. Añade los otros ingredientes y licue a velocidad baja para evitar producir una espuma.
Vierta el licuado en un molde refractario de 2 litros y hornéelo a temperatura moderada
(175C o 350F), durante 45 minutos o hasta que un cuchillo puesto en el centro salga completamente limpio.
Inmediatamente colocar el budín en un recipiente de agua fría, para evitar que se corte. Sirva tibio o frío.